Hace años que en la isla se rumoreaban los abusos de UM , el exceso de gasto del Palma Arena, los fraudes del metro los errores de obras injustificadas, como la economía era boyante nadie parecía creer que esto se iba acabar.
Por cualquier parte de la isla que te movieses las casas nacían como champiñones, la obra civil estaba disparada, Pla Mirall, todo ello deprisa y corriendo, parecía el boom de los años 70 con el nacimiento de los hoteles, pero de pronto hemos tocado fondo y lo que ahora se ve son las heces de cuando los pozos se secan, esta saliendo a flote toda esa corrupción que nos ha rodeado.
Esperemos que no nos pase como en caso túnel de Sóller, que cuando se encontraron a los culpables el delito ya había prescrito y seguimos pagando la financiación del túnel.
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