Hace unos años el hombre convivía con los animales y había unas especies a las que se les llamaba domésticos ( perros, gatos) otros de granja ( vacas, gallinas ) y convivían ya que uno dependía del otro y cada uno hacia su labor , el perro guardaba el ganado y las defendía de intrusos u otros animales los caseríos, el gato se alimentaba de los ratones que aleja de la casa y el animal de granja para la subsistencia de la familia, los dos se respetaban y ninguno invadía el terreno del otro y a su manera ambas se querían, no hacia falta una ley para proteger.
Es cierto que el hombre actuaba como controlador de natalidad de esos animales, ya que cuando la camada era muy numerosa procedía a regalar las crías o las sacrificaba .
Hoy se les esteriliza para que no procreen a no ser que sean de raza y pedigrí y se comercia con ellos y una de las cosas peor vistas que hay es maltratar a un animal, cosa que es muy correcta.
Por otra parte nos dedicamos a decirles a los jóvenes que deben aparearse y gozar de su cuerpo enseguida que se les despierten los instintos sexuales , que eso de querer preservarse para la persona querida no es mas que una ridiculez hay que aparearse y cuando estamos en celo debemos salir a la calle a buscar hembras o machos receptivos como nosotros y aparearnos , al fin y al cabo es lo que dice la naturaleza, en cuanto eres sexualmente activo hay que procrear.
Esto conlleva un pequeño riesgo, enfermedades y embarazos no deseados, nos equipamos con el kit sexual y a gozar, si fallase alguna de las medidas que habíamos tomado , no hay que preocuparse mucho ya que con unos antibióticos , la pastilla del día después o un aborto en el tiempo legal podremos subsanar los accidentes que podamos haber sufrido en la época de celo, al fin y al cabo que es toda esa parafernalia .
VIVIMOS EN EL SIGLO DEL PLACER Y DEL ORGASMO.
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